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ARGENTINA Y CAMBIO CLIMÁTICO El CAMBIO CLIMÁTICO ES INEVITABLE. Dado el bajo nivel de nuestras emisiones de gases de efecto invernadero, es poco lo que podemos hacer desde la Argentina para moderar su intensidad. Lo que sí podemos hacer es PREPARARNOS PARA AFRONTAR SUS CONSECUENCIAS. La sociedad planetaria está estructurada alrededor de la CULTURA DEL PETRÓLEO, un recurso energético a punto de agotarse o, por lo menos, en vísperas de convertirse en cada vez más escaso y caro. Pero eso no nos salvará de la futura BORRACHERA DE DIÓXIDO DE CARBONO; por lo menos dos de los más importantes responsables de las emisiones (USA y China) tienen grandes RESERVAS DE CARBÓN y las usarán. Para afrontar el problema, un cambio de costumbres es inevitable en todo el mundo. En particular, es imperioso reformular los recursos energéticos. El caso argentino es agudo. La necesidad de nuevas fuentes de energía (eólica, nuclear, biocombustibles, etc) se plantearía antes. Como consecuencia del proceso de devaluación y la necesidad de conservar niveles de precios internos en niveles razonables, durante los últimos años –merced al paraguas de las retenciones- nos hemos acostumbrado a VIVIR COMO SI EL PRECIO DEL PETRÓLEO NO HUBIERA AUMENTADO. Esta irrealidad, de la que es muy difícil salir sin elevado costo social, es insostenible a corto plazo, dadas las escasas reservas de hidrocarburos. Por lo dicho, la problemática del cambio climático no es un tema más del menú ambientalista. Requiere un diseño de desarrollo en consonancia con la nueva y aparentemente inevitable realidad. Las autoridades deberían superar las limitaciones impuestas por su transitoriedad, encarando audaces políticas de estado para preservar la estructura social y tomar la iniciativa en la dirección correcta antes que otros países. 14nov06
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